La decoración de la casa o de la oficina, no es tarea fácil, pues hay que tener presentes varios aspectos a la hora de convertir cada espacio, en un lugar acogedor, cálido e inigualable.
Una manera de darle nuestro toque personal a los ambientes, es mediante el uso de cuadros o portarretratos. Sin embargo, es primordial mencionar que, el arte radica en una perfecta organización, esto quiere decir que, no es necesario poseer una infinidad de cuadros para hacerlos lucir, basta con tener bien en claro cuál es el efecto que se desea lograr. Y aquí es donde, además del estilo personal, también entra en juego la iluminación del hogar para concentrar miradas hacia el rincón que queremos resaltar.
Para lograr una buena decoración, muchas veces es necesario dejar a un lado el valor sentimental de los objetos y evitar la saturación visual... el exceso de cuadros o pinturas, e incluso muchas fotografías familiares enmarcadas pueden causar una impresión contraria a la que queremos conseguir.
Hay que ser moderados con la colocación de cuadros, y a su vez, inteligentes para combinarlos de tal forma que se distinga cada uno de ellos dentro del conjunto de elementos, siendo los cuadros polípticos un claro ejemplo de ello.
La mejor combinación se basa en los colores o en la forma de los marcos que poseen, así como en la agrupación de las temáticas que abordan los cuadros como tal... Muchos cuadros, fotos o láminas enmarcardas, poseen una gran carga emocional, conviéndose en elementos indispensables para nuestro hogar y para nuestro ser, porque no únicamente forman parte de la decoración, sino también de nuestra propia historia. Por ello, hay que enfocarse en aquello que se desea transmitir, así lograremos una perfecta ornamentación.
Para una óptima decoración, conviene agrupar los cuadros en función a sus tamaños y colores |
Para lograr una buena decoración, muchas veces es necesario dejar a un lado el valor sentimental de los objetos y evitar la saturación visual... el exceso de cuadros o pinturas, e incluso muchas fotografías familiares enmarcadas pueden causar una impresión contraria a la que queremos conseguir.
Hay que ser moderados con la colocación de cuadros, y a su vez, inteligentes para combinarlos de tal forma que se distinga cada uno de ellos dentro del conjunto de elementos, siendo los cuadros polípticos un claro ejemplo de ello.
Tips para una excelente combinación de cuadros
- Si de fotografías se trata, es necesario organizarlas por tamaños, y luego se recomienda colgarlas de manera tal que las más grandes no opaquen la visualización de las más pequeñas. Una buena manera de lograr este efecto, es ubicarlas creciente o decrecientemente. Pero si deseamos una decoración moderna más que vintage, podemos recurrir a los marcos digitales, donde podemos almacenar un montón de fotos, sin necesidad de descartar ningún momento ni experiencia vivida.
- En el caso de los cuadros pequeños conviene situarlos en forma líneal o circular... todo dependiendo de la cantidad que poseamos, otra opción sería simulando un graderío.
- A los cuadros de pinturas abstractas se recomienda agruparlos. La idea es que combinen entre sí, por ello la gama de colores utilizada en las pinturas, es fundamental. Por otro lado, es importante no mezclar fotografías con pinturas, porque ofuscan la mirada.
- Los cuadros con frases o con imágenes, son ideales para colocar sobre muebles o aparadores, sin necesidad de estar colgados en la pared. La decoración vintage nos regala esa oportunidad de jugar con los tamaños y las formas para recrear ambientes únicos.
- Nunca hay que colgar cuadros rotos, averiados o que necesitan cambio, puesto que dan una mala imagen a la sala de tu casa, y también habla mal de quién la decoró. Es mejor tener pocos, bien distribuídos y en perfectas condiciones para embellecer los ambientes.
- Ubicar los cuadros que tienen el mismo color de marco en el mismo sitio, es otra opción interesante, pues en este caso, no necesariamente tienen que coincidir las temáticas de las pinturas, ya que combinarán entre sí de manera natural.
La mejor combinación se basa en los colores o en la forma de los marcos que poseen, así como en la agrupación de las temáticas que abordan los cuadros como tal... Muchos cuadros, fotos o láminas enmarcardas, poseen una gran carga emocional, conviéndose en elementos indispensables para nuestro hogar y para nuestro ser, porque no únicamente forman parte de la decoración, sino también de nuestra propia historia. Por ello, hay que enfocarse en aquello que se desea transmitir, así lograremos una perfecta ornamentación.